6/11/2007
E um peixinho vermelho
El Zagloso lleva dos días a fados
Por la mañana, por la tarde y por la noche. Fado va y fado viene. Vamos, que de pequeña resaca de una semana por Portugal. El monotrema ha descubierto al Mario Pacheco, que compone y toca la guitarra (portuguesa) y a un grupo nuevo que se llama Deolinda.
El Zagloso recomienda que escuchen con calma una de las canciones: Nao sei falar de amor. Pacheco, que ya es un señor consagrado, hace canciones como ésta para Mariza con un poema de Pessoa. Ah, y el monotrema promete que en un par de años no va a volver a probar pescado, ni un peixinho vermelho de nada. Ha cubierto su cuota de peixe para un para una buena temporada.
Por la mañana, por la tarde y por la noche. Fado va y fado viene. Vamos, que de pequeña resaca de una semana por Portugal. El monotrema ha descubierto al Mario Pacheco, que compone y toca la guitarra (portuguesa) y a un grupo nuevo que se llama Deolinda.
"O seu nome é Deolinda e tem idade suficiente para saber que a vida não é tão fácil como parece, solteira de amores, casada com desamores, natural de Lisboa, habita um rés-do-chão algures nos subúrbios da capital. Compõe as suas canções a olhar por entre as cortinas da janela, inspirada pelos discos de grafonola da avó e pela vida bizarra dos vizinhos. Vive com 2 gatos e um peixinho vermelho..."
El Zagloso recomienda que escuchen con calma una de las canciones: Nao sei falar de amor. Pacheco, que ya es un señor consagrado, hace canciones como ésta para Mariza con un poema de Pessoa. Ah, y el monotrema promete que en un par de años no va a volver a probar pescado, ni un peixinho vermelho de nada. Ha cubierto su cuota de peixe para un para una buena temporada.
Etiquetas: Deolinda, Fado, Mario Pacheco
Comments:
<< Home
sardinas, pulpo, camaroes (gambas elefantiásicas del Atlántico)... Me quedan pendientes los camaroes con queso, aunque las gambas con emmental de Papúa estaban bastante buenas, ummmm
Publicar un comentario
<< Home