12/19/2006

 

La cinta del miedo

El Zagloso ante el problema del bien y el miedo

Hans Robertiner, prestigioso teólogo de la Universidad de Hamburgo y antiguo colega de pupitre del Papa, establece en su última obra: Teología cotidiana: Dios en el Metro y otros escritos, una curiosa tesis. En su opinión, las cintas de equipajes en los aeropuertos demuestran la existencia de la divinidad y la bondad ontológica del hombre. Robertiner las ve como una alegoría de un ser superior que ofrece sus dones y del buen humano que toma extrictamente lo que le corresponde, en total respeto y armonía con su prójimo.

El Zagloso considera dicha tesis una aberración que deja bien claro que Robertiner es un mediocre con buen corazón. Desde su modesta opinión, el monotrema considera que las cintas de equipaje son un instrumento de tortura psicológica, cuyo funcionamiento se basa en un sentimiento lejano a la bondad: el miedo. Decenas de personas recién sacadas de una experiencia tan poco natural como estar suspendido se enfrentan a la tarea de recuperar sus bienes. De repente se abre una compuerta y se agolpan ante la cinta mientras esperan que salga lo suyo y se afanan por recogerlo. Nadie coge lo que no es suyo por miedo a que alguien coja lo suyo. Miedo, simple miedo.

Comments:
eXtrictamente? :?

es decir, si "mente" es de adverbio, o de modo... y "ex" es eso... "ex", que ya no es aunque lo era... entonces eXtrictamente significa que antes se hacía de manera "tricta" y ahora ya no? :S

o sólo es una falta de ortogarfía? ;D

en cuanto al miedo de los equipajes, toy contigo, q si creyera en la metáfora divina sería muy turbio tener q asumir q a veces tu maleta no llega... o llega rota (como el otro día :_P) o... porque entonces, qué pasa, qué la realidad divina es azarosa?... nah, más q "divinas" (osea, no) las cintas d equipajes son diabólicas. :P
 
Y el miedo a robar la maleta de Rappel.
 
pues he de decir que yo le doy dos minutos a que salga mi maleta y si pasado ese tiempo no ha llegado, arramplo con la que más me gusta, que normalmente es tambien la mas voluminosa y me voy agradecido por los dones arrojados por la divinidad, pensando en lo bien que hago en viajar siempre sin equipaje.
 
Platija, eres un desaprensivo. que lo sepas.

yo tiemblo cada vez que espero mi maleta, sobre todo cuando las primeras aparecen abiertas y con otdas las pertenencias así, desmembradas, mostrándonse impúdicamente al resto de pasajeros...

De todas maneras, Zagloso, te lo tomas un poco a la tremenda.
 
Gecko, sí es una falta de ortografía, pero no acepto lecciones de un tipo que pone "q" en lugar de "que" o "toy" en lugar de "estoy", por no hablar de su super-entrañable de ayer.

Anómalo, un escalofrío recorre mis púas.

Platija trabaja usted por el caos de la humanidad, algo que le agradecemos los monotremas.

Perli, ¿a la tremenda? ¿yo? ¿un aeropuerto? No, qué va.
 
Pues estamos apañados!
 
Y a mí que lo que me ha llamado la atención es eso de que cada uno coja estrictamente lo que le corresponde en armonía... Joder, ojalá y fuera cierto.
 
y se me acaba de ocurrir... no será la divinidad más bien como un montón de abrigos en un bar? xq ahí tb hay una masa informe y cada uno coge el q necesita en buena armonia, no? ;)
 
Perli, pues sí.

Gato, Robertinger vive en otro mundo, comprendale. Gecko, lo del montón de abrigos en un bar... ¿Dios termina en suelo, oliendo a tabaco y con alguna copa derramada por encima?
 
Para qué cargar con 20 kilos ajenos que no sabes lo que contienen?
A mí me sorprende más los albergues... jamás me han robado nada, y eso ya es mosqueante. La invasión de las bainas? En qué mundo vivimos...
 
El miedo es a que tus maletas acaben en Nueva Zelanda y tengas que aguantar hasta el lunes con la ropa puesta.
 
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