11/01/2006

 

Chorrada vikinga

El Zagloso reclama la dualidad manta-sábana frente a la funda nórdica

Érase un zaglosín chiquitín al que mamá zaglosa obligaba cada mañana a hacerse la cama. Desde los siete años, todos los días, después de desayunar, lavarse y vestirse, el pequeño monotrema sabía que tenía que colocar la sábana de abajo, la de arriba con la medida cogida para hacer el dobladillo, las dos mantas y la colcha. Luego, por las noches, el zaglosín dormía feliz en su camita bien hecha.

Aunque han pasado los años, el Zagloso ha mantenido la costumbre. Todos los días se hace la cama como dios manda, salvo casos de resaca sobrehumana. Se tarda un minuto y por la noche uno duerme bien arropado, bien calentito con su manta y sus sábanas, notando todo el peso de la lana y la seguridad de una sábana bien remetida por los lados.

Últimamente tiene un extraño éxito eso de la funda nórdica. En acelerada colonización, de Ikea al Carrefour, se impone ese engendro que ni arropa, ni se remete, ni nada. Gran parte de las ventas de este estrafalario cubrecamas corresponden a madres que creen que sus churumbeles así sí harán la cama. Se engañan. Sesudos estudios demuestran que da lo mismo. Otro argumento en defensa del producto sueco es que es muy calentito. Claro, y una buena manta zamorana no. El juego de cama tradicional tiene la ventaja de lo bien que se gradúa el arrope. Colcha arriba, colcha abajo, manta arriba, manta abajo y así sucesivamente.

En definitiva, el Zagloso afirma taxativamente que es un clásico en la cama*...

*No se pierdan las definiciones de cama según el Drae y según la wikipedia.

Comments:
Cuente conmigo para esta empresa Zagloso, no puedo concebir las frias noches de invierno sin el peso de la sábana-manta-otramanta-colcha!!

Aunque claro, igual en Papúa no hace mucho frio... Por cierto que vi un reportaje ayer de Papúa y estuve muerta de risa toda la tarde...
 
Yo es que he sido de toda la vida de edredón nórdico, que nos los trajimos de Alemania en el 79 y debimos ser los pioneros.

Será por eso que odio que me envuelvan en mantas y que estén las sábadas tan remetidas que no te dejan mover ni el dedo meñique del pie.
 
No se crea, Neblina, en las montañas refresca bastante por la noche y a partir de cierta altura, hasta nieva.

Perli, es usted posmoderna.
 
Yo diría que Perli se considera portadora. Como el mono de Estallido.
Zagloso, cuando dentro de unos años duerma usted bajo un nórdico (o una nórdica), le recordaré, cargado de sarcasmo y mordacidad, este post.
 
Señor Anómalo, debería usted saber que soy un tipo de principios. Le pongo como ejemplo mi empeño en que me caigan mal y carles mal a los tunos. No cejo.
 
Y cuando una monotrema interesante te frunza el ceño al oírte decir que eres un clásico en la cama... ¿cómo lo piensas arreglar?

Yo, como siempre, no me caso con nada. A veces estoy cansada y me agrada el peso de las mantas sobre el cuerpo, como madre que te arropa y te apresa para que duermas por cojones. Otras veces tengo la cama peor que la de la niña del exorcista, y entonces es menos complicado continuar tapada con un nórdico...
 
Gato, me alegra que me haga esa pregunta... Supongo que algo así como que soy un clásico en las formas y un revolucionario en el fondo.
 
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
 
Es que lo he visto... y había que echarte un cable, que te habías dejado en evidencia... ;P
 
Gracias
 
A mandar.
 
Me recuerdan ustedes una línea de diálogo del señor Lobo.
 
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