6/01/2006

 

Dependientas

El Zagloso es un tipo astuto e implacable, una roca

Un monotrema que se precie se conoce los trucos de los humanos. Les ve venir y les desmonta con maquiavélica precisión. Cuando el Zagloso va de compras actúa con sigilo: elegir, ver, coger, probar y pagar. No hay más. Esta es la teoría.

La duda es ¿por qué tengo tanta ropa que no me pongo? ¿por qué tengo una minicadena chulísima a la que se le levanta toda la parte de arriba? Consumido por la incertidumbre repasé todas y cada una de mis adquisiciones. Hay un tipo de vendedor que me desarma.

Para ser sincero es un tipo de vendedora. Los dependientes lo tienen complicado conmigo, soy un comprador racional y decidido. De hecho no les necesito.

Como ser astuto desconfío de las dependientas pibones. No son creíbles. Me se su rollo, pretenden que mire su escote en lugar del producto en cuestión, sea una piña o una corbata. Con descaro oteo su canalillo y compro en otro lugar: "lo siento, no me convence, en el fondo están caídas".

Mi perdición son las vendedoras simpáticas: muchachas normalillas físicamente que me engatusan con miradas pizpiretas. Sobre todo me desarman las mosquitas muertas. Son capaces de que crea que me quedan bien unas mallas combinadas con una camiseta de rejilla y unos zapatos castellanos. Me ven, se acercan sonrientes y entones me azoro y sólo recupero el sentido cuando salgo por la puerta del comercio. A dos les guardon infinito rencor.

Tengo unos pantalones horrosos de loneta gris. Me los he puesto una sola vez y pagué 40 euros por ellos. Entré en una tienda de barrio a por unos vaqueros y me atendió ella. Veintitrés años, metro setenta, cartucheras billy el niño, pelo rubio de bote con raíces, pero era más maja. Me sacó tres pantalones distintos hasta que encontré la talla y siempre se reía, me miraba con ojos tiernos cuando cojía el bajo y claro... me azoré y cual quinceañero pasé por caja.

Yo quería una minicadena normalita. Entonces le pregunté: ¿esta tiene mando a distancia? Lo siguiente que recuerdo es cargar una caja en el maletero del zaglosomovil. Era bajita, modernilla, pelo corto y una forma graciosísima de llevar el flequillo. La cagué.

Soy un blando, qué le vamos a hacer.

Comments:
¿¿pizpiretas??
 
Zagloso, ha salido el House of the Dead 4. ¡¡Tenemos una misión!!
 
pizpireta.
(De or. onomat.).
1. adj. coloq. Dicho de una mujer: Viva, pronta y aguda.
 
Desde luego, qué blando... pero qué blando eres, Zagloso.
Hay que entrenar la capacidad de decir que no, para los momentos difíciles. Aunque reconozco que la situación en la que te cogen el bajo de unos pantalones me ruboriza hasta a mí...
 
Por eso yo arrastro los pantalones.
 
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